Treinta y ocho años tenia,
y paralitico estaba,
cerca a un estanque vivía,
pendiente y no se movía,
mas la esperanza tenia,
que algún día seria sano.
Quieres ser sano le dice,
el hijo del Dios Eterno,
no tengo quien me levante,
y me lleve pronto al estanque,
mas cuando yo ya voy cerca,
otro desciende primero.
Y Jesús le dice toma tu lecho,
y vete a tu casa,
no hay necesidad del ángel,
del estanque ni del agua,
solo tú debes creerle,
y al instante serias sano.
y paralitico estaba,
cerca a un estanque vivía,
pendiente y no se movía,
mas la esperanza tenia,
que algún día seria sano.
Quieres ser sano le dice,
el hijo del Dios Eterno,
no tengo quien me levante,
y me lleve pronto al estanque,
mas cuando yo ya voy cerca,
otro desciende primero.
Y Jesús le dice toma tu lecho,
y vete a tu casa,
no hay necesidad del ángel,
del estanque ni del agua,
solo tú debes creerle,
y al instante serias sano.
Canta: Rickardo Arevalo - El paralitico
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